Por fin 2: 4 Segundos

Otra novedad del año pasado, muy esperada, fue la recopilación de 4 Segundos, publicada por Editorial Ivrea. Caso similar al que comenté anteriormente en la entrada de Los mitos de Cthulhu, 4 Segundos es otra de las historietas que acrecentó su fama con el paso del tiempo, y se esperaba su reedición. Muy pedida por los lectores a Ivrea, editorial que la había anunciado y se venía demorando, se pudo decir también “por fin” al ver el libro, muy bien editado, con la totalidad de la obra.
Con guión de Alejo García Valdearena y dibujo de Feliciano García Zecchin, autoeditado por los autores con el sello Pipabang, 4 Segundos apareció en su propia revista en 1999. Sólo siete números salieron, más que suficientes para ganarse al público y dejar con ganas de más, y ser considerada una de las mejores historietas argentinas de aquellos años.
4 Segundos es una comedia protagonizada por cuatro amigos, Aníbal, El Zurdo, Marcos y Terli. Personajes definidos y de carácter distinto, lo que da lugar a fricciones y desencuentros que son parte de la gracia de la serie. El Zurdo (¡ese apodo!), el cínico y bromista –pesado a veces-; Aníbal, el más centrado, con una familia no tan centrada; Marcos, el tímido, que no puede nunca encarar a Marina, compañera de trabajo del Zurdo, de quien está enamorado; y Terli, personaje con tendencia al absurdo y un poco tonto, que recuerda al Joey de Friends.
Comedia de situaciones, con cosas de famosas sit-coms como Friends o Seinfeld –la serie acerca de nada–, los enredos de cada capítulo pueden girar en torno a asuntos irrelevantes, con distintas subtramas desarrollándose, y una impecable construcción del argumento con todo confluyendo al final. Y por supuesto, algunos chistes inolvidables, que hacen reír como pocas veces leyendo una historieta.
También de las sit-coms es el recurso de agregar una tira cortita al final, tras las notas que acompañaban y cerraban las revistas, a modo de remate o epílogo, emulando las breves escenas que acompañan los créditos finales de las series televisivas, y presentan una situación que se desprende de lo visto en el episodio.
Sólo siete números salieron de la revista, cancelada prematuramente. Muy poco para la calidad entregada, y que dejaron esperando el octavo que nunca salió. El libro trae como bonus las cuatro páginas del fanzine presentación de la serie, coloreado para la ocasión.
Salió 4 segundos, para los que no pudieron leerlo y lo esperaban, y una buena excusa y oportunidad de reelerlo para quienes tenemos la suerte de tener las revistas. Ya lo hice, y me reí como antes, o más.